SANTO DOMINGO. El SuperSánchez ya no estará más en el óvalo, al menos como corredor de los 400 metros con vallas. Ayer, Félix Sánchez, bajo lágrimas y a puro esfuerzo, como lo hizo en las pistas del mundo, enfrentó la parte más difícil de su laureada carrera: el retiro.
Lo hizo en la sede del Comité Olímpico Dominicano, vía videoconferencia por Skype, y cuando justamente ayer se está a 100 días de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
Alrededor de las 3:30 p.m. de ayer, Sánchez señalaba que dejaba de competir, aun cuando se siente en plenitud de condiciones. “Me retiro saludable, sin lesiones y en forma”, expresó Sánchez, forzosamente dominado por el llanto.
Lo que más ha pesado ha sido la familia. Su esposa Carina Sánchez y su hijo recién nacido Asher Jay Sánchez, ellos han sido los que ha impulsado el adiós definitivo, una despedida para un atleta que lo ha tenido todo, superado tan sólo por el legendario Edwin Moses.
“Desde hace días, he venido pensando en dar por terminados los días de competencia”, señaló Sánchez desde Los Angeles en compañía de su eterno manejador, Tony Campbell. Aquí estaban el presidente del COD, Luisín Mejía y el presidente de la Federación Dominicana de Atletismo, Gerardo Suero Correa. “Nació mi hijo hace poco, y ese chiquito me necesita mucho en este momento”.
Y sigue: “Así que puse en una balanza lo logrado hasta hoy, y lo que me faltaba por hacer”. Al instante, Sánchez cargaba a su hijo Asher.
Y recordó lo que pasó después de venir sin oro de unos Juegos Panamericanos: “Las palabras de mis fanáticos…” (aquí se detuvo a sollozar por unos 10 segundos por el resto de las palabras que se avecinaban, mientras Campbell lo respaldaba con palmadas en su espalda) “no nos debes nada, me dijeron muchos. Y con esa fuerza y ese apoyo que recibí, y sé que recibiré de todos los seguidores dominicanos, hoy anuncio mi retiro de las competencias. De las pistas.”
Después de la era Moses, nadie ha sido más grande que Sánchez, y si bien el estadounidense despunta por sus 122 carreras ganadas en forma consecutiva, Sánchez encadenó 43 triunfos, la segunda racha más larga después del incomparable de Moses.
El SuperSánchez es dos veces medallista de oro olímpico (Atenas-2004, 47.63/Londres-2012, 7.63) y dos veces mundial (Edmonton, Canadá-2001, 47.49/St. Dennis, París, Francia- 2003, 47.25), incluida una plata (Osaka, Japón-2007, 48.01).
En los Panamericanos de 2003 destapó una de las mayores emociones de ese certamen, al romper el protocolo durante el desfile, y plantarse con la bandera dominicana en el centro del campo de fútbol; días más tarde se hacía del oro en el Estadio Olímpico, coreado por unos 25 mil fanáticos y que desde del 24 de octubre de 2004 lleva su nombre.
“Mi mayor orgullo es que el Estadio Olímpico lleva mi nombre”, apuntó Sánchez vía Skype.
Entre tantos agradecimientos, ofreció uno a su esposa Carina Sánchez, “que me ha apoyado en cada triunfo y en cada fracaso, y me ha dado el mejor de los regalos, a mi hijo”.
Sánchez será parte de la cadena deportiva estadounidense, ESPN. “Luego les contaré otros planes que tengo con el fin de que el atletismo de mi país siga desarrollándose, si contamos con el apoyo de los sectores”.
El domingo, un día después de entrenar en Los Angeles, Estados Unidos, desde donde fue la videoconferencia, Sánchez se comunicó con Mejía y su representante en el país, Carlotti Peralta. Es por eso que inmediatamente a las 11:40 p.m. del lunes, el COD convocaba a la prensa para ayer.
“Que Dios ilumine tu camino como hasta ahora lo ha hecho, en todo lo que te propongas. Que viva un grande, que viva Felix Sanchez!!!!”
“Un día muy triste para el atletismo dominicano y mundial, nuestro Super Sanchez anuncia su retiro de las pistas. Dios te Bendiga por siempre”, escribió el técnico José Rubio en Facebook.
“Félix Sánchez es un motivador, es un ícono”, dijo Mejía. “Es el más grande atleta que ha representado los colores patrios”, agregó Correa.
Lo que queda registrado es que por más de 10 años, fue uno de pocos atletas que hizo vibrar a la nación.