REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Todos los padres saben lo difícil que es a veces alimentar a un niño. Y si vas a comer a una cafetería con toda la familia, se vuelve aún más complicado complacer al pequeño: no le gustan los platillos del menú o dice la famosa frase: “No tengo hambre“ o ”No se me antoja”.
En un pequeño restaurante ubicado en el estado de Pennsylvania, Estados Unidos, inventaron cómo alimentar incluso a los niños más caprichosos. Así es como luce un menú para niños: